Tratamiento para tumor de piel Asturias, lo que debes saber.
La piel protege al cuerpo de numerosos agentes externos, como puede ser el sol, el calor o el viento, entre otros. Cuando se desarrolla un cáncer de piel, se encuentran células cancerosas o malignas en las capas más externas, conocidas como epidermis.
La piel está formada por dos capas la interior o dermis y la exterior o epidermis y varios tipos de células. Además, la piel es un sistema que emplea nuestro cuerpo para almacenar agua, grasa y vitamina D.
Melanoma y otros.
Existen diversidad de tipos de tumor de piel, pero entre los más frecuentes encontramos el cáncer de piel no melanoma, es decir aquellos tumores que afectan a las células basales y a las células escamosas. El melanoma es otro tipo de tumor que afecta otras células que se encuentran en la piel, los melanocitos. Siendo este último mucho más grave que los dos anteriores, aunque también menos frecuente. También pueden darse tumores de piel benignos como la Queratosis Seborreica, Nevus, Quistes o Dermatofibromas.
Lo importante
El principal síntoma que presenta un tumor de piel es algún tipo de alteración o modificación del aspecto que presenta la piel en un punto en concreto del cuerpo. Puede ser una mancha rojiza áspera o escamosa, una protuberancia o una herida que incrementa su tamaño o no acaba de curarse.
Cuando se detecta un cambio en el aspecto de nuestra piel debemos acudir al médico para que examine la alteración cutánea, haciendo hincapié en la forma, el tamaño, el color y la textura que presenta.
Ante este tipo de tumor la manera de proceder más frecuente es la extirpación de la parte afectada, esta técnica puede complementarse con la cirugía de Mohs, dependiendo de la localización de la alteración o si presenta un tamaño considerable. La mayor parte de los tratamientos para este tipo de patología se realizan con anestesia local y sin necesidad de ingreso hospitalario.
Nuestro equipo te ayudará
Desde Clínica Barón queremos recordarte la importancia de la prevención para evitar los problemas cutáneos. El mejor método, el más eficaz para evitar sufrir un cáncer de piel no melanoma, es no exponerse a los rayos de sol sin una protección adecuada a cada tipo de piel y a la coloración que esta presenta.
Los rayos ultravioleta que se emplean en cabinas bronceadoras también pueden resultar perjudiciales, si no se utiliza la protección adecuada. Además conviene evitar la exposición al sol sin protección en las horas centrales, porque es cuando los rayos ultravioleta presentan una mayor intensidad.
Tratamiento para tumor de piel Asturias.